“Cuando encuentres una gran fuerza, alegría y bondad en tu corazón, o cuando te sientas libre y sin contradicciones, inmediatamente agradece en tu interior”.
1. “Agradecer” significa concentrar los estados de ánimo positivos asociados a
una imagen, a una representación. Ese estado positivo así ligado permite que en
situaciones desfavorables, por evocar una cosa, surja aquella que la acompañó
en momentos anteriores. Como, además, esta “carga” mental puede estar elevada
por repeticiones anteriores ella es capaz de desalojar emociones negativas que
determinadas circunstancias pudieran imponer.
2. Por todo ello, desde tu interior volverá ampliado en beneficio aquello que
pidieras siempre que hubieras acumulado en ti numerosos estados positivos. Y ya
no necesito repetir que este mecanismo sirvió (confusamente) para “cargar
afuera” objetos o personas, o bien entidades internas que se “proyectaron”,
creyéndose que atenderían ruegos y pedidos.
XVIII. Acción y reacción de la Fuerza; el libro
La Mirada Interna, Silo.